80’s are back

Este vestido playero ya hizo su buen servicio, pero un ataque perruno dejó una huella imborrable en él. Lo aprovechamos para hacer el famoso, y nunca bien ponderado, vestidito de flecos que hizo furor en las playas españolas en los 80. Me han comentado que lo puedes encontrar en muchos sitios turísticos (lo dicho, los 80 han vuelto) pero intentaremos huir del “Alguien que me quiere mucho me trajo esto de Santa Pola”.

Necesitarás:
- Una camiseta vieja de algodón ligero
- Hilo
- Máquina de coser, alfileres, cinta métrica, tijeras…

Para la decoración necesitarás:
-Pintura de tela
-Plástico de burbujas

-Plancha

1. El Patrón
Cogemos una camiseta o un vestido de la niña y lo doblamos por la mitad longitudinalmente. Copiamos la silueta sobre la camiseta vieja, doblada a su vez por la mitad. Dibujamos con tiza el contorno y dejamos el largo libre.

 

2. Cortando la tela
Cortamos según el dibujo dejando algo menos de medio centímetro para margen de costura. Tendremos dos piezas idénticas. En la pieza delantera, rebaja el cuello cortando un poco más de tela.

3. Cosiendo
Coseremos por los hombros, dejando la manga sin coser, y por los costados, desde la sisa, sin llegar hasta el final del largo.

Cortamos la tela de las mangas en tiras de algo menos de un centímetro de ancho. Hacemos lo mismo con el bajo de la falda. Después estiramos cada tira para que se rice. Por último, podemos darle forma al bajo del vestido recortando las tiras en pico o en semicírculo.

4. Decorando
Para darle un toque moderno al vestido, vamos a estamparlo “imprimiendo” con plástico de burbujas (visto en I am Momma hear me roar - Bubble Wrap Tee). Si decides hacer este paso, hazlo antes de recortar las tiras.

Asegúrate de meter un plástico, cartón o tela “mártir” entre el vestido para que no calque de una parte a otra.

Impregna el plástico de burbujas con pintura para tela diluida con agua. No hace falta que cubra perfectamente, quedará más chulo si es irregular. Planta el plástico en la prenda, presiona ligeramente sin desplazarlo y levántalo con cuidado. Déjalo secar y sigue las instrucciones del fabricante para fijar la pintura.

Puedes añadir más detalles con pintura o impregnar el plástico con varios colores sin dejar que se mezclen entre sí.

Y este es el resultado final, a por ello!